Natación

Este fue mi profe de natación del año pasado de iniciación, se llama Jóse, es buenísimo, jugaba con nosotros, se tiraba al agua los viernes, que era el último día de piscina. Aquí esta disfrazado de algo que nunca supe. Cuando pasé a la Escuela me tocó con Ana. Pero le dije a mamá y a papá si me podían cambiar. Menos mal que había una plaza libre para ir los Martes y Jueves. Me cambiaron con Julio. Julio es muy cañero. Hay que hacer muchos largos y no paramos un segundo. Solo cuando explica lo que hay que hacer. A mi se me da bien la natación, pero  me está empezando a aburrir, me gusta mucho el Tenis, pero solo voy dos veces a la semana. Si quiero ir más, tengo que hacerlo con papá y él me quiere enseñar que si a botar, que sin salirse del pasillo que si la raqueta así, y al final acabo enfadada. 

Decidí comentarle a mis papás lo del cambio con Julio antes de ir a Tenis, menos mal que salió lo del Tenis, tenía plaza sin problemas ...excusa buena para pedir el cambio. Como os contaba decidí decírselo a mis padres lo del cambio por una sola razón: Ana, en el informe de natación trimestral puso cosas que me pusieron triste y lloré. "¿que si le gusta la actividad a la niña ?" "que si iba a flotar de un lado a otro" "que no estaba estimulada",hasta Jóse le dijo a mamá que "iba a mi bola"  y así fué como le hice la cruz a Ana. A raíz de ese informe los Reyes Magos me trajeron bañador nuevo negro, gafas de piscina y gorro de silicona que no tira el pelo. ¿Para qué tanto gorro? si al poco la escuela nos dió uno azul con el logo de las piscinas de mi ciudad para ponerlo "obligatoriamente" ya que era un regalo. Y todo esto por culpa de Ana.