viernes, 10 de octubre de 2014

Soy un poco más mayor


Hace mucho tiempo que no escribo nada y no es por que nada me haya pasado, imaginaros me rompí hasta un diente. La cuestión es que tuvimos un nuevo miembro en la familia, Enzo, hijo de mi hermana Hiedra, os acordáis de ella? Pues fue mamá este Verano. Yo estaba bastante celosa ya que mamá no paraba de encontrarlo hermoso, precioso y siempre dándole mimos, aunque estamos a 200 km ella siempre estaba pendiente de él, tampoco era para tanto, no era ni tan guapo, ni tan rico, no hacía nada. Ahora igual hace algo. Eso si, se rie mucho,parece que de mayor va a ser simpático. Mamá me ha dicho que es horrible, que es un borde y un pesado, yo creo que lo hace para que yo me quede tranquila.
Mamá por aquella ya tenía un poco de psoriasis, acabó con un brote por todo el cuerpo, pobre, utilizó mil cremas y nada, yo a veces le ponía cremita en los brazos, creo que le encantaba.
Ya para que la cosa terminara definitivamente en un desorden tremendo y caos se vino a vivir mi abuela a casa. Papá dormía en el salón en un sofá que tiene unos dos millones de años y mamá dormía en el suelo, en un colchón que ella misma se fabricaba cada noche, la abuela dormía en la habitación de mamá y papá, en el colchón de latex. Andabamos chocándonos por todos los lados, yo no podía jugar con los clicks en medio del salón, la abuela se podía tropezar, no podía ver la tv en la habitación de papá y mamá, ya no era lo mismo, así poco a poco mamá se fue desesperando, papá desesperando y yo absolutamente desesperada, mamá decidió alquilar el piso de Katia. Tiene dos habitaciones, un salón precioso lleno de luz, todo el día luz, no vemos a los vecinos que toman cosas en las terrazas, vemos chalets, el camping, la subida al pueblo etc...en general el piso es mejor, yo estoy feliz, aunque papá nos dió la plasma pequeña, me da igual, mamá dice que es mejor, que la plasma grande es horrible en los salones. Recuerdo el día en que nos dieron las llaves, baje 5 mil bolsas del super llenas de ropa, baje mi ropa en una hora, sude a mares pero lo baje todo, menos los zapatos. Nunca más dormí allí, en mi antigua habitación. Ahora duerme papá, pobre papá durmiendo en ese sofa viejo.
Nos vemos todos los días, subo a darle el beso de buenas noches a papá o baja él. Estamos en contacto todo el tiempo que quiero. Mamá sube poco, a mamá le gusta mucho la casa y la decora a su manera, llena de cosas raras y a veces rotas, muñecos con cara de budu, hasta tiene unas babuchas de esas de marruecos con los PINCELES y BROCHAS de pintar, acaso ni puede ponerlo en un lapicero normal y corriente?
El diente me lo rompí con un remo, estaba yo haciendo Padel y el mar no estaba muy calmado y saludé a Deva (que es la que alquila las tablas y me hace precio guay) y pumba me metí el remo dentro de la boca.
 Otra cosa importante, somos los mayores del colegio, el año que viene nos vamos al Instituto, ahí seremos los pequeños.